Está bonita Ceuta en primavera, aunque no tengamos cerezos que nos hagan lo que dice Neruda en sus versos. Anda linda, con ese sol que te acaricia sin dañar y el mar tranquilo donde los valientes se aventuran a nadar en sus playas.
Nos han florecido los naranjos del Revellín, los lirios lucen enhiestos, como las fotos de Milán y apasionadamente violetas.
Subo por la Calle Real estornudando, con falta de aire pero feliz, mi naturaleza alérgica me limita el paso, pero no las ganas de disfrutar de sus calles. Me gusta la explosión de color que tiene la primavera en mi tierra.
En mi barrio han florecido las margaritas, pese al poco cuidado de la ciudad a que el extrarradio tenga flores, ellas renacen cada primavera para recordarnos que ni las malas gestiones políticas ni la desidia local pueden con la renovación de la vida.
Me gustan las margaritas silvestres y las abejas que revolotean….
Ayer, Viernes Dolores, bebiendo Barbadillo en el bar de mis amores pasaba un Vía Crucis por la calle. El olor a incienso llenó el local, paganismo y religión andaban de la mano en esos minutos que todos y todas seguíamos la procesión mientras devorábamos jamón sin acordarnos que era viernes de Cuaresma. Fue mágico. Contradictorio y extraño andar allí. A mi me gustó, quizás por el contraste, por la antitesis cotidiana de que todo el mundo ve que es normal celebrar la Semana Santa así, entre bares y procesiones.
A lo mejor es la herencia romana, o la íbera, que celebraba la primavera sacando a sus diosas a la calle, quizás andemos en un primitivismo ancestral que no reconocemos pero nos marca a los pueblos mediterráneos. Y la explosión de olores, colores y vida nos llene hasta el punto de vivir la Semana Santa de forma festiva y pagana.
Esta noche no me apetece analizar los credos, buscar dónde empieza la religiosidad y el paganismo, dónde llegan las jerarquías de las Cofradías y el fervor popular ante una imagen.
Esta noche me gusta imaginar a los políticos de riguroso negro procesionando, me recuerdan a los versos del poeta:
“Gran pagano se hizo hermano
De una Santa Cofradía
El Viernes Santo salía
Con un gran cirio en la mano.
Aquel trueno vestido de Nazareno».
Feliz Semana Santa o feliz Fiesta de Primavera, que cada cual la viva a su manera y haciendo lo que más le guste. Por lo pronto mañana me pongo a hacer torrijas. El bacalao con tomate tocará el Jueves Santo y el Viernes pondré el potaje de chocos con garbanzos…
Si ustedes gustan ando aquí, al norte de África, sólo tienen que asomarse.
Africa Puente Cristo (una mujer de Ceuta) 
He escrito otra versión sobre el mismo tema… y juro que no te había leído. ¿Será sintonía?
Un beso y feliz «torrija»
Por cierto, amiga, preciosa descripción haces sobre la primavera caballa con sus olores a esencias multiculturales observadas desde la altura que te proporciona el Castillo de San Diego y el taburete jamonero. ¡Bon appetit, cherie!
Feliz primavera,amiga,el lunes paso por nuestra tierra a pasar la semana santa en Marruecos,voy muy ilusionada con mi marido,mi nuera y mi hijo,este no lo pisa desde que era niño,guarda algo de ese exquisito potage para el domingo que igual antes de embarcar tengo un ratito y me como un platito,un besote
Pues ya sabes, si tienes tiempo Rosi nos vemos. Estaría encantada de conocerte,
Besos
Te voy a hacer caso, África, y voy a tomarme la Semana Mayor tal y como lo planteas… con cierta dosis de prozac, dejando pasar la vida y disfrutando de TODO lo que tega que venir. Gracias, por la lección.